Que en un pueblo tan poco habitado, y estando solos para cenar, te hagan una cena vegana es digno de agradecer y admirar.
Buena la burrata, bueno el rollito mediterráneo, buena la decoración y el ambiente, buena muy buena la atención.
Decadente pero con mucho encanto. Quizás demasiados niños sueltos sin un padre o madre que les lleve de la mano. Agradable para pasear, aunque se agradecería más tranquilidad.
Un jardín impresionante para tomar un café a media tarde, ya sea al aire libre o en su mirador.
No es el colmo del glamour, pero compensa con platos veganos muy bien ejecutados (albóndigas de soja con arroz, croquetas de espinacas...), atención eficiente y afable, y una localización agradable.
Ambiente tranquilo. Café bien preparado. Leche de soja y bollería artesana. Muy agradable para primera hora de la tarde.
Nos atendieron de forma impecable. Cenamos fuera porque no teníamos reserva. La tortilla bien saca unas lágrimas de lo buena que está. Y la tabla de quesos gallegos también. Tienen albariño de 500 ml.
Buenos platos saludables, como el trío de untables o los tallarines de calabacín. Servicio eficiente y atento. También posibilidad de tomar algo en su terraza. Gran descubrimiento.
Qué rico todo! (como siempre) La terraza es muy agradable y las ensaladas muy sabrosas
Muy sabrosos todos los helados. Mis preferidos son los de frutas, como mango y pistacho. Y los rellenan muy muy bien :)
Encantadores, mucho. Habitación acogedora y correcta. Salón para tomarte un té o café. En pleno centro del pueblo.
Comida muy sabrosa y saludable, paraíso para los veganos. Dulces crudiveganos de impresión. Local amplio y precioso, así como la terraza. Camareros un poco despistados pero agradables. Genial!
Ambiente acogedor, tartas caseras, chocolates y cappuccino. De las mejores opciones para la media tarde.
Local sin pretensiones q esconde la mejor pizza napolitana que he probado en Madrid, y en algunos sitios de Italia. Personal encantador, atento y eficiente. Precios muy ajustados. Para volver y volver
Café muy bien preparado y muchos dulces caseros para acompañar. Pero te sientes un poco hacinado con mesas tan juntas y tanto Mac por metro cuadrado.
Un café estupendo, bizcocho casero, y un ambiente ecléctico muy agradable. Los bancos para sentarse no son el colmo de la comodidad.
Todo muy rico: la hamburguesa de quinoa, la de remolacha, las croquetas... Ambiente muy agradable. Reserva porque hay 4 mesas escasas.
Muy buen descubrimiento. Muchas referencias interesantes de vinos por copas, con una tapa de queso parmesano.
Pizza de masa fina, como debe ser. Ambiente tranquilo incluso en fin de semana.
Vintage hotel,lovely atmosphere.Still running some major renovation,so the lobby and lifts are a mess.My room was renovated,modern & functional.Old style bathrooms.Lovely staff.Cleaning could improve
Los platos no son especialmente grandes, pero todo está muy sabroso. Especialmente recomendable su interpretación de la tortilla de patatas. Apenas 4 mesas, reserva! Precio elevado para la cantidad.
Un clásico para tomar el vermouth acompañado de unas aceitunas. Sitios como éste no deberían desaparecer nunca.
Cientos de cervezas, algunas verdaderamente originales. El personal sabe recomendarte muy acertadamente. Comida para picar basada en patatas y salchichas.
Los platos son grandes, ideales para compartir. La burrata y las alcachofas, tremendas. Los postres muy escasos. Buen servicio y ambiente agradable. Precio medio-alto.
